Fulgor

Manel Loureiro en su última novela nos plantea una lucha entre el bien y el mal. Los Hijos de la Luz y los Oscuros se enfrentan en Fulgor, una novela de ritmo vertiginoso, con tintes sobrenaturales y de terror, suspense e intriga. 

Resumen

La vida de Casandra es casi perfecta hasta el día en que sufre un extraño accidente de tráfico que la deja en coma. A las pocas semanas, y tras una recuperación milagrosa, Casandra descubre que todo su mundo ha cambiado por completo: alguien ha empezado a acechar su casa y a su familia y además sufre una secuela inquietante que no puede controlar. Atrapada en una espiral de violencia y asesinatos a su pesar, perseguida por las autoridades y por algo más que no es capaz de entender, Casandra inicia una huida desesperada que se puede cobrar un precio enorme: su cordura y su alma. 

El Fulgor Manuel Loureiro plantea un apasionante reto al lector: ¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar para salvar a los tuyos? ¿Qué sacrificarías de verdad? ¿Dónde están tus límites?. 

Impresiones

Casandra es una de esas superwoman típicas de los tiempos que corren. Psiquiatra en un Centro de Internamiento Permanente de Pacientes de Tratamiento Especial, conocido popularmente como El Trastero, combina su vida laboral con la familiar, siendo esposa y madre de un niño. Sumergida en la monotonía, no sospecha que su vida está a punto de cambiar para siempre. 

Un día, por azar, se ve envuelta en un extraño accidente de tráfico que le dejará varias semanas en coma. Milagrosamente sobrevive, pero no sólo despierta perfectamente recuperada, sino que además posee un nuevo don de lo más sorprendente. En ella se ha instalado el "Fulgor", una capacidad paranormal que le permite ver un mundo de color. Estas percepciones extrasensoriales  que le servirán para no sólo reconocer a Los Oscuros, sus nuevos enemigos, sino también para calcular el tiempo de vida que le queda a una persona. 

Sin tiempo para asimilar y adaptarse a su nueva capacidad, Casandra se ve envuelta en una serie de sucesos de lo más violentos. Pronto dejará de ser un simple testigo, para convertirse en el objetivo de esos seres extraños que parecen alimentarse del dolor de las personas, los Oscuros. Una amenaza tanto para ella, como para su familia. Así pues no le queda más remedio que buscar respuestas a tantas preguntas sin resolver, y entonces conocerá a Logan Dawson, un paciente del Trastero con su mismo don. Mientras tanto, las extrañas muertes siguen sucediéndose, y entrará en escena su marido, Daniel, casualmente inspector de policía. 

Fulgor tiene uno de esos comienzos envolventes que te atrapan por sorpresa. Sus primeros capítulos producen desconcierto, vértigo, ansiedad, miedo... Sin embargo, esos tintes de terror van dando paso a los paranormales, y ahí es donde personalmente me desinflé, pues algunos acontecimientos me "chirriaban". Una sensación muy extraña, pues aunque no llegaba a convencerme la historia, no podía dejar de leer. Y eso en parte es culpa de la pluma de Manel Loureiro.  Su prosa es ágil y sencilla, no usa tecnicismo ni florituras y sabe mantener al lector en vilo, desvelándole secretos a cuenta gotas, guardándose la pólvora para el final. 

El elenco de personajes es lo de más interesante y verlos evolucionar un deleite, pues el autor sabe llevarlos hasta el límite, y en algunos casos, incluso hacerles traspasar la linea de lo que consideran moralmente correcto. Un acierto por parte de Manel Loureiro, es tratar el tema del bien y de mal como algo inherente al hombre. Siempre ha existido esta lucha, aunque a veces haya sido más fácil obviarla. 

Sin embargo, esperaba mucho mas del autor y Fulgor no ha conseguido cautivarme. Sumergirse en sus paginas es similar a subirse a una montaña rusa, pues el ritmo de la trama es vertiginoso, no hay respiro para el lector. Pero he terminado con esa sensación de quién te ha ofrecido un caramelo delicioso, pero al final te lo roba. Un principio magistral, un final estridente. Quizás mi escepticismo me jugó una mala pasada. 

- Eres una Nacida en la Luz, Casandra.

- ¿Qué significa eso? 

- Significa que puedes verlos. Que eres capaz de distinguirlos entre la multitud, que su disfraz no vale de nada ante tus ojos. Pero eso significa que ellos pueden verte a ti, así que es una arma de doble filo.