El desafío de Becca

Becca sigue cautivando allí por donde pasa. Nuestra terapeuta no pasa desapercibida con sus alocados rizos y esa forma tan personal de atraer problemas. En El desafío de Becca vuelve dando lo mejor de sí misma a sus excéntricos pacientes. Lena Valenti lo ha vuelto a conseguir.

Resumen

A Becca le han pasado muchas cosas buenas con su nuevo programa, pero también algunas muy malas... pero no pierde nunca su sonrisa ni la esperanza de saber quién es en realidad Axel. Pero en esta nueva novela viviremos muchas más emociones con Becca: Eli y Carla le darán una sorpresa; aparecerá su ex novio; tomará de nuevo las riendas de su programa y conocerá a adorables y disparatados pacientes mientras intenta ignorar que su acosador sigue libre y pisándole los talones. 

Nuestra psicóloga favorita volverá a sufrir, a amar, a disfrutar, a quedarse sin aliento, y todo con Axel, el Dios del Olimpo, que empieza a mostrarnos su verdadera cara. 

Impresiones

Y si El diván de Becca me encantó, la segunda parte de la trilogía no se ha quedado atrás. Lena Valenti vuelve a darnos lo mejor de si misma en esta trilogía de alto voltaje que ha conquistado a miles de lectores. Y no es para menos. 

Tras el accidente que sufrío en Tenerife, Becca despierta en un hospital de la ciudad condal. Tiene algunas secuelas, pero nada en comparación con lo que podría haber sufrido. Estuvo tan tan cerca de la muerte... Pero Axel, su ángel de la guardia, llegó justo a tiempo para rescatarla de un trágico final. 

Afortunadamente ya pasó. Y ahora nuestra terapeuta se encuentra en Barcelona disfrutando de los mimos de su familia, mientras recarga fuerzas para volver al programa. Con miles de seguidores en las redes sociales, El Diván de Becca está siendo todo un éxito sin precedentes. Pero ella no puede dejar de pensar en Axel. Su cámara y editor anda en paradero desconcido, tras salvarla del ataque de Vendetta. Ha cumplido su promesa, si ella le traicionaba, él desaparecería. Y así ha sido. 

Una vez más, es Becca la que nos irá relatando sus aventuras en el Diván. La carabana sigue su camino para tratar a nuevos pacientes que no dejarán de poner a prueba a nuestra terapeuta, cuyos métodos poco ortodoxos estan causando auténtica sensación. Becca tiene chispa, tiene ese algo que cautiva. Es como si tuviere una varita mágica y al tocar con ella, emansea la felicidad. Y todo gracias a su empatía, ese don no solo de percibir los sentimientos de las personas que la rodean, si no también, de sentirlos como si fuesen propios. 

Con un estilo sencillo y directo, Lena Valenti teje una historia de lo más adictiva. Al igual que en el primer libro, Becca se verá envuelta en situaciones extremas y necesitará de todo su ingenio para salir airosa de ellas. Con pacientes de lo más peculiares, Becca hará gala de sus particulares métodos, tan originales como divertidos. Una terapia de choque capaz de cambiar la vida hasta a los más excépticos. 

Y sin dar un respiro al lector, Becca y Axel volverán a ese tira y afloja al que nos han acostumbrado. Si bien, Axel dejará de ser tan enigmático y poco a poco iremos vislumbrando parte del secreto que oculta. También conoceremos mejor a los personajes secundarios, tanto a Ingrid y Bruno como a los familiares de Becca, sobre todo a Carla y Eli, que van a destapar una sorpresa que dejará a nuestra protagonista sin respiración. ¡Y conoceremos a David! Si, ese "valiente" que dejó a Becca por FaceTime tras cinco años de relación... 

El desafío de Becca es canalla, atrevida, fresca, divertida... Y muy, muy sexy. Una comedia romántica que derrocha pasión con momentos muy subiditos de tono. No faltan sorpresas, ni tension narrativa. Y como no podía ser de otra manera, nos regala una buena dosis de risas, de esas que al menos, nos dan un par de añitos de vida. Creedme, Lena Valenti saca todsa su artillería. Más que recomendable, es imprescindible. 

"@bullshit #eldivandeBecca En mi oficina dicen que tengo TDA. Yo creo que hay momentos en los que estoy suficientemente aburrido como para pensar a quién va a matar el ventilador del techo"

* Gracias a DeBolsillo por el ejemplar